Don nadie, Daniel Rabanaque y zombra mantienen desde 2006 una relación cómplice que propone una exploración de los abismos abiertos en el alma gris de lo cotidiano, un recorrido ecléctico por una tierra incógnita en la que se produce la deliciosa labor de traducción, en música, imágenes y palabras, de aquello que, aun siendo prácticamente imperceptible, alimenta, abriga y conforta los deseos de una realidad 'otra': viva, humana, flexible y con futuro. Les invitamos a que pasen y vean nuestra seria tentativa de tomar al asalto junto a ustedes el paraíso terrenal, de hallar un cielo minúsculo, (si es que existe todavía esa tendencia natural del ser humano) que no tenga una hipoteca, ni etiquetas, ni usureros haciendo el agosto a su costa.
Nos vestimos cada mañana con el alma a flor de piel y cada noche, sin licencias, ni permisos, ni derechos, con una punta de estupidez e inocuidad, que combinan bien con cualquier bebida alcohólica,con dudoso gusto y discutible talento, sin el instrumental recomendado, y si es necesario a ojos vendados, procedemos a su disección, un trabajito limpio de amputación del dedo de señalar: una VIVISECCIÓN EN DIRECTO DEL ALMA, el centro de las emociones.
http://www.zombra.es/don_nadie.htm
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